El uso del gas natural para la calefacción supone un consumo muy elevado, sobre todo en aquellas zonas con climas fríos que necesitan mantenerla encendida durante mucho tiempo, y acaba convirtiéndose en una factura de gas natural muy elevada para el propio usuario.
El cliente que busque un ahorro en la factura del gas deberá tener en cuenta aspectos como el precio, el servicio ofrecido por la comercializadora y también las condiciones del propio suministro.
Una de las formas para ahorrar en la factura del gas natural es comparar las ofertas del mercado, dado que existen una gran cantidad de ellas y cambiarse de compañía de gas podría ser beneficioso para el consumidor.